Me juré no volver,
y nunca más caer.
y nunca más caer.
Decidí que era mi paz mental,
mi mayor prioridad.
mi mayor prioridad.
¡Qué paz mental ni qué ocho cuartos!
Me estaba volviendo más loca.
Me estaba volviendo más loca.
El no hacer lo que más sentía,
era mi peor pesadilla.
Mi mente no cesaba de imaginar,
no paraba de recordarme lo que quería.
no paraba de recordarme lo que quería.
¿Qué iba a hacer?
Si lo que prometí por paz mental,
provocaba en mi,
Si lo que prometí por paz mental,
provocaba en mi,
todo, menos paz mental.
Comments
Post a Comment